Christian Quezada y su piano
Para celebrar el 14 de febrero, día del amor y la amistad, el Programa Alquimia de las palabras invitó al joven músico y pianista Christian Quezada, para compartir una tarde música y poesía sobre el amor y el desamor. Christian Quezada, conocido por todos como Milky joven quiteño, apasionado por la música, fue por más de seis años tecladista de la banda Papá Changó y ESTO ES ESO. Christian, en su infancia, empieza su formación musical, SINAMUNE es la puerta de entrada y el Maestro Edgar Palacios dirige sus primeros pasos. La trompeta y el sintetizador despertó sus sentidos, mientras su corazón definía ya su pasión: el piano.
Milky, como sus amigos los llaman, a pesar de su discapacidad visual, continuo sus estudios en el Conservatorio Nacional de Música titulándose como Bachiller técnico, en la especialidad de piano, y posteriormente graduándose como licenciado en Pedagogía Musical. Christian reconoce en su madre a su pilar y su impulso en este camino de la música.
Christian Quezada, tecladista, cuenta con un repertorio amplio y diverso que incluye New Age, Clásica, Latinoamericana, Pop Reggae, Ska, Tropical, Música Nacional. Junto a Papá Changó ha representado al Ecuador en múltiples escenarios internacionales como son; Francia, Italia, España, Alemania, Cuba, Colombia, Perú, los jóvenes han vibrado con su música.
En su trayectoria artística ha compartido escenarios en varios festivales nacionales e internacionales con artistas como: Grupo Quimera, Pueblo Nuevo, Azuquito, Rubén Blades, Marc Anthony, Eva Ayllón, Piero, Los Van Van, Sara Gonzáles, Gondwana, Los Nocheros, León Gieco, Calle 13, Manu Chao, entre otros. Ha grabado varios discos, y también ha incursionado en la actuación en vídeos musicales que han sido proyectados en la televisión nacional e internacional como en la cadena MTV. Ha participado en comerciales de Tv y ha sido invitado de ENCHUFE TV.
Quezada sostiene que sí se puede vivir de la música, que es una profesión tan significativa y que aún en nuestro país es poco valorada. Sugiere que los padres de familia apoyen los talentos artísticos y musicales de sus hijos, porque si un talento es cultivado, ese don se convertirá en su pasión y aportará muchos éxitos en la vida futura de quien lo practique.